El candidato a la Alcaldía y portavoz de Coalición Canaria en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria analiza con expertos en la materia la situación de la pobreza en la ciudad y anuncia un plan integral municipal de lucha contra la pobreza
Los datos del Informe AROPE señalan que la población vulnerable de Las Palmas de Gran Canaria asciende hasta llegar al 39% y se localiza fundamentalmente en las zonas urbanas, concretamente en el Cono Sur y Ciudad Alta
Francis Candil aboga por generar una red de áreas transversales que trabajen de la mano junto con Servicios Sociales, esto es, vivienda, empleo, salud mental, cultura o educación, entre otras
El nacionalista reclama el cumplimiento de la Ley de Políticas Sociales, aprobada por unanimidad durante el Gobierno de Coalición Canaria, y advirtió: “Debido al incumplimiento de esta ley, las familias vulnerables de Las Palmas de Gran Canaria están dejando de recibir 14 millones de euros del Gobierno de Ángel Víctor Torres, una cuantía que sin duda les ayudaría a paliar su situación personal y a salir de ella”
El candidato a la Alcaldía y portavoz de Coalición Canaria en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Francis Candil, ha anunciado la creación de un plan integral de lucha contra la pobreza a nivel municipal. Así lo ha afirmado tras analizar con varios expertos en la materia la realidad social que vive la capital, donde el índice de pobreza asciende hasta el 39%; una población vulnerable que se localiza sobre todo en el Cono Sur y en Ciudad Alta.
Estos datos se han puesto sobre la mesa durante la celebración de la jornada ‘El rostro de la pobreza en Las Palmas de Gran Canaria’, un coloquio en el que han participado María Dolores Fabelo, presidenta del Colegio Oficial de Trabajo Social de Las Palmas; Marcial Morales, exconsejero de Políticas Sociales del Gobierno de Canarias; y Penélope Rubio, trabajadora social y delegada sindical de UGT en el Ayuntamiento capitalino.
El nacionalista explicó que la fotografía de la pobreza en la capital tiene rostro de mujer, con cargas familiares y que vive sola; así como rostro de persona mayor, una población cada vez más vulnerable. “Los datos sobre la pobreza en la capital han crecido de manera exponencial en los últimos años. Cáritas, por ejemplo, en los últimos tres años ha duplicado el número de personas a las que atiende. De ahí que la crisis de la Covid y la crisis económica de los últimos tiempos, unido a la inflación por la guerra de Ucrania, nos obliguen a tener estrategias claras de intervención frente a esta pandemia en que se ha convertido la pobreza y que vivimos hoy en día”, apuntó.
Con todo, Francis Candil abogó por intervenir las Políticas Sociales y dijo: “La pobreza requiere de algo más que de ayudas sociales. Hay que generar toda una red de áreas transversales que contribuyan a sacar de su situación a las personas vulnerables; áreas como la vivienda, la salud mental, la educación o el empleo, entre otras. Se trata de herramientas que están a nuestra disposición pero nuestros responsables políticos deben coordinarlas unas con otras para que, entre todas, logren cubrir las necesidades de cada individuo”.
Por otra parte, el candidato de CC a la Alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria reclamó el desarrollo de la Ley de Políticas Sociales, aprobada por unanimidad en el Parlamento de Canarias durante el gobierno de Coalición Canaria, y apuntó: “Esa Ley fija cuantías económicas que administraciones públicas como el Gobierno de Canarias debe aportar a los ayuntamientos. Según esto, el Ejecutivo autonómico tiene que financiar el 40% del presupuesto social del Consistorio, pero al incumplirse la Ley, los ciudadanos vulnerables dejan de recibir 14 millones de euros al año; una cuantía que sin duda les ayudaría a salir de su situación”.
Asimismo, esbozó que ningún vecino es ajeno al perfil de la pobreza en la ciudad: “Las crisis han provocado que ciudadanos que antes eran trabajadores de clase media, hoy tengan que pedir a las puertas de una entidad de reparto de alimentos. Por lo tanto hay que llegar a ellos con políticas de empleo, de salud mental, de vivienda, con políticas asistencialistas, etc., cada uno lo que necesite. Y hay que hacerlo de manera ágil, puesto que aún hoy en día asistimos a esperas de cinco meses para una primera valoración por los Servicios Sociales, a unos empleados públicos agotados y a una falta de músculo administrativo que no se ha reforzado pese a la falta que hace”, subrayó.
Una cuestión con la que simpatiza la presidenta del Colegio de Trabajadores Sociales, María Dolores Fabelo, quien subrayó: “Las políticas sociales van más allá de las ayudas. Falta transversalidad en las distintas áreas e implicarlas en los planes y proyectos que se desarrollen sobre los temas sociales. Los Servicios Sociales son arcaicos y asistencialistas, y está claro que las políticas que se llevan a cabo en este momento no funcionan porque no reducen el ratio de pobreza en la ciudad. Por lo tanto hay que diseñar un mapa adaptado a la situación que vivimos actualmente y dotar de más profesionales al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, ya que existe una gran carencia de medios humanos”.
Por su parte, Penélope Rubio, trabajadora social y delegada sindical de UGT en el Consistorio capitalino, recalcó: “La situación de Trabajo Social en el Ayuntamiento ha pasado a ser una función asistencial por la carencia de recursos humanos. Nos dedicamos a tramitar ayudas, pero el ciudadano no ve al servicio como una ayuda en sí. Tras la pandemia, la situación se ha agravado muchísimo y los recursos siguen siendo los mismos. Eso ha provocado numerosas bajas laborales, con lo cual las citas al ciudadano son eternas y hay precariedad en el área. La solución pasa por cambiar el método de trabajo: organizar un itinerario de cada persona, escucharle y atender sus necesidades”. Asimismo, añadió: “Necesitamos que se duplique el personal existente para hacer un trabajo de calidad y que los servicios con las diferentes áreas estén mejor coordinados. Además, hay que mejorar la cercanía al ciudadano, la burocracia y simplificar los trámites”.
Finalmente, el exconsejero de Políticas Sociales del Gobierno de Canarias, Marcial Morales, expuso que la pobreza en la capital tiene rostro de barrio, concretamente de mujer con cargas familiares. Indicó que la soledad no deseada toma peso en la sociedad y apuntó que dentro de 15 años, de cada cuatro viviendas familiares, en una de ellas vivirá una sola persona, pese a no ser una decisión personal. “Hay estudios sobre la realidad social pero no estrategias para paliar la situación. Los barrios empiezan a llenarse de población envejecida, las medidas anticrisis activadas por los distintos gobiernos por la Covid y la guerra se acabarán y esas familias vulnerables seguirán en la misma situación. La pobreza ya no es ajena a ninguno de nosotros, vive a nuestro alrededor, y la solución pasa por la colaboración transversal de las distintas áreas, por el desarrollo comunitario de los barrios. Una estrategia que funcionaba y ha caído en el olvido”, sentenció.
